Читать книгу 101 cuentos sanadores - Susan Perrow - Страница 23
SEGUNDO EJEMPLO
ОглавлениеNecesitamos un cuento para un niño de cinco años que constantemente hace daño a los demás con sus manos. Tras observar que uno de los animales favoritos del niño es el elefante, vamos a introducirnos en el cuento empezando con un símil: “una mano que pega es como el porrazo de la trompa de un elefante salvaje”.
Ahora ya tenemos un punto de partida en el que podemos sumergirnos directamente. “Había una vez un elefantito llamado Tembo, uno de los más fuertes entre los elefantes jóvenes de la manada; sin embargo, siempre usaba su trompa para dar golpetazos y porrazos a las cosas” (“La trompa del elefante”, página 97).
Como sabemos que a los niños de cinco años les encanta el ritmo y la repetición, utilizaremos un motivo rítmico que acentúe su comportamiento y lo repetiremos varias veces a lo largo de nuestro cuento: “Golpetazos y porrazos, / golpetazos y porrazos, / con mi fuerte trompa, / golpetazos y trompazos”.
La devastadora trompa del elefante (reforzada con el ritmo y la rima) es una metáfora de “obstáculo” o “impedimento”. El desarrollo del cuento nos lleva a una cascada en lo alto de un acantilado rocosos y escarpado (otro obstáculo). El elefante está intentando darle un golpetazo a su hermano mientras cruza el salto de agua y se cae por las resbaladizas rocas a la poza que se encuentra más abajo.
Entra en escena, como “metáfora de ayuda”, la abuela elefanta, que hasta este momento ha intentado servir de guía a Tembo, aunque él ha preferido ignorarla. Ahora está atascado en una poza de agua en el fondo del acantilado y necesita ayuda. La siguiente metáfora “de ayuda” que aparece en el desarrollo del cuento es la cuerda de rescate hecha de las trompas encadenadas a las colas de elefantes; formada por la combinación de la fuerza de la abuela y la de sus hermanos, es esta “cuerda” la que consigue subir a Tembo sano y salvo.
Mediante la utilización de ambos tipos de metáforas, de obstáculo y de ayuda, este cuento ofrece un sencillo viaje de transformación que se inicia al “utilizar la propia fuerza para hacer daño” y concluye al “utilizarla para ayudar”. A partir de un enfoque alegre y divertido, el cuento conduce a una resolución positiva y el comportamiento recupera su equilibrio.