Читать книгу Construyendo contratos - Angel Carrasco Perera - Страница 25

7. Todos los procesadores de texto contienen herramientas de redacción con control de cambios que permiten mostrar, aceptar y rechazar los cambios introducidos en el contrato, así como a su autor o autores, de manera que las partes pueden fácilmente identificar a las personas que participan directamente en la redacción, las cláusulas que son aceptadas y los cambios que cada una de ellas incluye en las sucesivas propuestas y contrapropuestas del contrato. La utilización de esta técnica durante el proceso negociador, muy habitual por su practicidad, parte siempre de la premisa de la buena fe en su uso, de manera que cada una de las partes puede confiar en que la otra u otras partes van a incluir todos los cambios en el documento utilizando el control de cambios, pudiendo considerarse acordadas todas las cláusulas aceptadas con la redacción de la parte que las propuso y centrarse únicamente en los cambios propuestos por la contraparte (tanto aquellos que aparecen marcados como tachados como las nuevas propuestas de redacción), evitando tener que leer en su totalidad el contrato en detalle en cada una de sus revisiones. La utilización del control de cambios permite a la contraparte realizar su contrapropuesta en sus propios términos, ganando tanto en tiempo como en claridad, pues se introducen los cambios exactamente como quiere la parte que los propone, y no sujeto a la interpretación de la otra parte, si únicamente es ésta la redactora.