Читать книгу Águilas - Fló Guerin - Страница 39

Canarios

Оглавление

En el centro de Águilas, al lado de la iglesia, hay una tienda donde venden canarios. Es un edificio antiguo, con un portal en arco que se cierra con una puerta enorme de madera, articulada en tres hojas. El viejo que la regenta también repara y vende sillas de enea y canastas de mimbre. Las paredes de la tienda son altísimas, deben de rebasar los seis metros. Están cubiertas de jaulas cuadradas, redondas y rectangulares, algunas diminutas y otras tan grandes que se dividen en varios compartimentos. No hay ninguna pajarera vacía ni existe hueco alguno en la pared. Los canarios cantan y compiten para callarse unos a otros, la tienda se escucha a varias calles de distancia. Federica opina que el viejo debe estar sordo o loco de remate. O las dos cosas.

Por la noche, cuando volvemos a casa después del paseo, yo le hablo del día que seremos ricas y de nuestra visita al viejo pajarero. Cuando le compremos todos los canarios y abramos todas las jaulas. Cuando el cielo de Águilas se ponga amarillo chillón y los trinos de victoria y libertad trastornen por sus agudísimas frecuencias a las sintonías de radio y televisión, al suministro eléctrico; cuando quede el pueblo a oscuras, sin más voces que no sean cantos. Cuento a Federica historias imposibles y le digo que nosotras vivimos dentro.

Águilas

Подняться наверх