Читать книгу Los libros del Nuevo Testamento - Antonio Piñero - Страница 46

En Hch 22,3 se afirma que Pablo era oriundo de Tarso, en Cilicia, al sur de la actual Turquía. Él nada dice de ello en sus cartas, pero no hay por qué dudar de este dato. Es claro, al menos, que Pablo es un judío de la diáspora, no nacido en Israel, y helenizado. Pablo afirma que su familia era genuinamente judía (Flp 3,5). Tampoco hay por qué dudar de ello. El que naciera en Tarso sitúa a Pablo en un contexto elevado de cultura helénica, pues la ciudad era famosa por sus escuelas de retórica y por su cultivo de las letras y las artes (Estrabón, Geografía XIV 5,13).

Pablo no dice nada en ninguna parte sobre la fecha de su nacimiento, ni tampoco Hechos. Pero, puesto que se autodenomina «anciano» (Flm 9), es posible que naciera en torno a los años 5-10 e.c. Tendría, pues, unos diez o quince años menos que Jesús. Para determinar aproximadamente la cronología de la vida de Pablo solo tenemos un dato: al final de una estancia en Corinto, Pablo fue acusado ante el procónsul romano de la provincia griega de Acaya, Lucio Junio Galión, de escándalo público, o bien de asociación ilícita, a causa de su predicación sobre Jesús (Hch 18,12). Sabemos por una inscripción hallada en Corinto que Galión fue procónsul de Acaya entre junio del 51 y mayo del 52 e.c. Por tanto, Pablo estaba en Corinto en esa fecha. A partir de este dato hay que reconstruir, hacia delante y hacia atrás, con mayor o menor verosimilitud, los sucesos principales de su vida y actividad.

Y en lo que se refiere a su lengua, es muy probable que Pablo tuviera el griego como lengua materna, pero según Hch 21,40; 22,2; 26,14, hablaba también hebreo y arameo. Tampoco hay por qué dudar de este dato, corroborado por pequeños detalles de su modo de escribir el griego. Por sus cartas, sin embargo, se ve que manejaba con notable soltura esta lengua. Es muy probable además que supiera al menos algo de latín, aunque no tenemos pruebas directas.