Читать книгу Economía del Estado de bienestar - Luis Ayala Cañón - Страница 30

2. LA EFICIENCIA GLOBAL

Оглавление

Del Gráfico 1 se deduce que la cantidad óptima del bien para la sociedad desde la doble vertiente de la producción y el consumo es X *. Con esa cantidad del bien se igualan el beneficio social marginal y el coste social marginal. Si el BSMg fuera mayor que el CSMg, la sociedad ganaría con el aumento de la producción de ese bien. Si se diera el caso contrario, la sociedad ganaría si se redujera el consumo del bien, ya que cualquier unidad adicional aumentaría más el coste que el beneficio social. Solo cuando se igualan los beneficios y costes sociales marginales deja de ser posible que aumenten los beneficios netos si lo hace la producción. Una manera, por tanto, de definir la eficiencia en la producción y el consumo de un bien es que BSMg=CSMg.

Cuando se pasa de un único bien al conjunto de la economía, puede decirse que hay una situación de eficiencia global si todos los bienes se producen y se consumen de manera eficiente. Siguiendo el criterio de optimalidad paretiana, existe eficiencia cuando cualquier reasignación de factores productivos de un bien a otro o cualquier reasignación del consumo entre los agentes da lugar a una reducción de la producción de algún bien o del consumo de algún agente. En otras palabras, una economía es eficiente si no existen oportunidades desaprovechadas.

Por tanto, para llegar a una situación de eficiencia global tiene que darse una doble condición: debe haber eficiencia en la producción y eficiencia en el consumo. La eficiencia en la producción implica que debe producirse la combinación óptima de bienes, dadas las tecnologías y las preferencias de los consumidores. Se estaría en esa situación cuando la economía en su conjunto no puede aumentar la producción de un bien sin reducir la de otro. Cuando hay recursos que no se utilizan, la economía no está funcionando eficientemente. Es el caso habitual de la economía española, en la que, incluso durante los períodos de expansión económica, hay un porcentaje importante de población activa que está desempleada.

La eficiencia en la producción no se da en una única cantidad de bienes producidos en cada sector. Puede haber distintas cantidades de bienes producidos que den lugar a situaciones en las que no se puede aumentar la producción de un bien sin reducir la de otro. Aunque hay distintos instrumentos para analizar esas disyuntivas en la producción de bienes, la frontera de posibilidades de producción es el más habitual (Recuadro 1).

Recuadro 1

EFICIENCIA EN LA PRODUCCIÓN

La frontera de posibilidades de producción recoge las disyuntivas a la que se enfrenta una economía a la hora de elegir combinaciones eficientes de producción de distintos bienes. Para simplificar el análisis, supóngase que solo se producen dos bienes (X,Y). Hay eficiencia en la producción cuando se llega a una situación en la que el aumento en la producción de un bien implica inevitablemente la reducción en la producción de otro bien. Esas situaciones óptimas se representan en la frontera de posibilidades de producción (FPP) de la economía:


La pendiente de la curva es la relación marginal de transformación entre X e Y e indica la cantidad de uno de los bienes a la que debe renunciarse para producir una unidad del otro. Los puntos a y b representan producciones factibles y eficientes: no es posible aumentar la producción de un bien sin reducir la del otro. El punto c representa una situación factible pero ineficiente y el punto d es una situación no factible con los recursos disponibles.

Es importante subrayar la importancia de las preferencias de los consumidores para que haya eficiencia en la producción. La disponibilidad de recursos puede hacer, por ejemplo, que un gobierno decida construir más centros culturales. Que haya recursos para ello no justifica por sí solo su construcción. Esos recursos tal vez podrían mejorar más el bienestar social si se dedicaran a educación, en el caso de que la combinación de factores haga más fácil la puesta en marcha de un colegio público, o a un centro sanitario, si esa opción se acomoda mejor a las preferencias de los ciudadanos.

La eficiencia en la producción es solo una de las dimensiones necesarias para que una economía sea eficiente. Para que haya eficiencia global tiene que haber también eficiencia en el consumo. Esta segunda dimensión puede medirse con criterios muy similares a los de la producción. Si la referencia es, de nuevo, la optimalidad paretiana, dada una determinada cantidad de bienes producidos, existe eficiencia en el consumo si cualquier otra redistribución de los bienes empeora a uno de los consumidores. Estos destinan su renta al consumo de bienes tratando de maximizar su satisfacción o utilidad. Si existen márgenes para que aumente la utilidad de un consumidor sin que empeore la de otros no hay eficiencia en el consumo. Las combinaciones eficientes de consumo de bienes se obtienen a partir de las curvas de utilidad individuales y pueden representarse en la Caja de Edgeworth (Recuadro 2).

Recuadro 2

EFICIENCIA EN EL CONSUMO

Para definir la eficiencia en el consumo se puede partir, simplificando, de una economía en la que solo hay dos consumidores (A,B) y en la que su utilidad está restringida por el consumo de X e Y. Existe eficiencia en el consumo cuando cualquier otra distribución de los bienes empeora a uno de los consumidores. Eso se produce cuando en los dos consumidores es igual la cantidad de un bien de la que se quiere prescindir para conseguir una unidad de otro. Esa relación entre bienes es la relación marginal de sustitución y la condición de eficiencia es que RMS Ax,y = (∂U A/∂X A)/(∂U A/∂Y A) = (∂U B/∂X B)/(∂U B/ ∂Y B) = RMS Bx,y. Las RMS son equivalentes a la pendiente de las curvas de indiferencia. En la caja de Edgeworth se representan las curvas de indiferencia de dos consumidores rotando las del consumidor B:


Las RMS de los dos consumidores se igualan en los puntos de tangencia de sus respectivas curvas de indiferencia. La curva que une todos los puntos de tangencia (curva de contrato) refleja todas las situaciones de eficiencia en el consumo. Un punto como d no es eficiente al no ser un óptimo paretiano: la reasignación de los bienes desde d a b haría aumentar la utilidad del consumidor B sin reducir la de A.

Para que haya eficiencia global, una economía necesita tanto eficiencia en la producción como en el consumo. Tiene que producir la cantidad máxima posible de cada bien y tiene que ser igual a los términos en los que los consumidores están dispuestos a intercambiar los bienes. Tal condición se cumple cuando la relación marginal de transformación se iguala a las relaciones marginales de sustitución (RMTx,y = RMS Ax,y = RMS Bx,y).

Economía del Estado de bienestar

Подняться наверх