Читать книгу Anuario de arbitraje 2017 - Mª José Menéndez Arias - Страница 41

Aunque la primera solicitud de recusación del presidente se formuló dos meses y medio después del cambio de representación, lo cierto es que la comunicación en la que se anunció ese cambio y las manifestaciones inmediatamente posteriores de la demandante fueron un primer indicio de lo que ocurriría más tarde: cinco solicitudes de recusación contra el presidente del tribunal arbitral y una contra los co-árbitros.

En efecto, en la mencionada comunicación, la demandante manifestó su desacuerdo con varias cuestiones del acta de misión previamente consensuadas, entre ellas el nombramiento del presidente del tribunal arbitral que, recordemos, había sido designado por la Corte de acuerdo con el reglamento de arbitraje de la CCI. En vista de ello, la Secretaría de la Corte solicitó a la demandante que aclarara si esa objeción a la designación del presidente del tribunal arbitral constituía una solicitud de recusación. La demandante no lo aclaró, por lo que la Secretaría de la Corte entendió que no se había formulado una solicitud de recusación.

Posteriormente, la demandante remitió una comunicación en la que anunció que estudiaría la posibilidad de recusar al presidente del tribunal arbitral. Las recusaciones formales llegaron más tarde.