Читать книгу Los mitos griegos - Robert Graves - Страница 21

15. El nacimiento de Eros

a. Algunos sostienen que Eros, salido del huevo del mundo, fue el primer dios, pues sin él no podría haber nacido ningún otro. Le consideran contemporáneo de la Madre Tierra y Tártaro, y niegan que tuviera padre o madre, a menos que ésta fuera Ilitía, diosa de los alumbramientos.¹

b. Otros sostienen que fue hijo de Afrodita y Hermes, o Afrodita y Ares, o incluso de Afrodita y su padre Zeus; o hijo nacido de Iris y el Viento del Oeste. Era un niño indómito que no demostraba ningún respeto por la edad ni el orden establecido, sino que volaba con sus alas doradas disparando al azar sus afiladas flechas o inflamando desenfrenadamente los corazones con sus terribles antorchas.²

1. Eros («pasión sexual») era una mera abstracción para Hesíodo. Los primitivos griegos le representaron gráficamente como un Ker, o «Malicia» alada, como la Vejez o la Plaga, en el sentido de que la pasión sexual descontrolada podía alterar el orden social establecido. Sin embargo, poetas posteriores encontraron un placer perverso en sus travesuras, y ya en la época de Praxíteles se le había envuelto con un halo sentimental de joven hermoso. Su santuario más famoso estaba en Tespias, donde los beocios le rendían culto como un simple pilar fálico —el pastoral Hermes, o Príapo, pero bajo un nombre distinto (véase 150.a). Los diversos relatos sobre sus antecesores son bastante aclaratorios. Hermes era un dios fálico, y Ares, como dios de la guerra, excitaba el deseo en las mujeres de los guerreros. El que Afrodita fuera la madre de Eros y Zeus su padre viene a decir que la pasión sexual no se frena ante el incesto. Que fuera hijo del Arco Iris y el Viento del Oeste es una fantasía lírica. Ilitía, «la que acude en ayuda de las parturientas», era uno de los títulos de Artemis, y significa que no hay amor más fuerte que el amor maternal.

2. Eros nunca fue considerado lo suficientemente responsable como para figurar entre las doce deidades regentes de la familia olímpica.