Читать книгу Los mitos griegos - Robert Graves - Страница 8
Оглавление2. Los mitos homérico y órfico de la creación
a. Algunos dicen que los dioses y todas las criaturas vivientes se originaron en la corriente de Océano, que envuelve al mundo, y que Tetis fue la madre de todos sus hijos.1
b. Pero los órficos dicen que la Noche de alas negras, diosa que inspiraba temor al propio Zeus,2 fue cortejada por el Viento y puso un huevo de plata en el vientre de la Oscuridad; y que Eros, al que algunos llaman Fanes, salió de ese huevo y puso el universo en movimiento. Eros poseía los dos sexos, tenía alas doradas, cuatro cabezas, a veces mugía como un toro o rugía como un león, y a veces siseaba como una serpiente o balaba como un carnero. La Noche, que le dio el nombre de Ericepayo y Protógeno Faetonte,3 vivía en una cueva con él manifestándose en su triple aspecto: Noche, Orden y Justicia. Delante de esa cueva se hallaba sentada la inevitable madre Rea, que tocaba un tambor de latón para llamar la atención de los hombres a los oráculos de la diosa. Fanes creó la tierra, el cielo, el sol y la luna, pero la triple diosa gobernó el universo hasta que su cetro pasó a manos de Urano.4
1. El mito de Homero es una versión del relato pelasgo de la creación (véase 1.2), ya que Tetis gobernaba en el mar como Eurínome y Océano circundaba el universo como Ofión.
2. El mito órfico es otra versión pero con influencias de una doctrina mística posterior del amor (Eros) y de teorías sobre la adecuada relación entre los sexos. El huevo plateado de la Noche representa a la luna, siendo la plata el metal lunar. Como Ericepayo («comedor de erica»), el dios del amor Fanes («el que revela») es una abeja macho celestial de fuerte zumbido, hijo de la Gran Diosa (véase 18.4). La colmena era objeto de estudio como modelo de república ideal y confirmaba el mito de la Edad de Oro, cuando la miel caía de los árboles (véase 5 .£>)• Rea tocaba su tambor de latón para evitar que las abejas enjambrasen donde no debían y ahuyentar las influencias malignas, como las bramaderas utilizadas en los Misterios. Como Protógeno Faetonte («primogénito deslumbrante»), Fanes es el Sol, que los órficos consideraban símbolo de la iluminación (véase 28.d), y sus cuatro cabezas corresponden a los animales simbólicos de las cuatro estaciones. Según Macrobio, el Oráculo de Colofón identificaba a este Fanes con el trascendental dios Iao: Zeus (carnero), la primavera; Helio (léon), el verano; Hades (serpiente), el invierno; Dioniso (toro), el Año Nuevo.
Con el advenimiento del patriarcado el cetro de la Noche pasó a Urano.