Читать книгу Comentario al texto hebreo del Antiguo Testamento - Profetas Menores - C. F. Keil - Страница 59

8, 1-3

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1 Lleva a tu boca la trompeta, pues un águila viene sobre la casa de Yahvé, porque traspasaron mi pacto y se rebelaron contra mi Ley. 2 A mí clamará Israel: Dios mío, te hemos conocido. 3 Israel desechó el bien: el enemigo lo perseguirá.

8, 1. La profecía se eleva con un salto vigoroso, como en 8, 5, para predecir el juicio. La primera sentencia es una exclamación, y por eso no tiene verbo. El mandato viene de Yahvé, como muestran los sufijos en la última sentencia, y está dirigido al profeta, que debe hacer que suene la trompeta, como heraldo de Yahvé, para anunciar al pueblo el juicio próximo. La segunda sentencia incluye el alarmante mensaje que ha de ser proclamado: como el águila, así viene el enemigo en contra de la casa de Yahvé. La imagen del águila que se abalanza sobre su presa, con la rapidez del rayo, evoca la amenaza conocida de Moisés en Dt 28, 49.

La casa de Yahvé no es el templo de Jerusalén (Jerónimo, Teodereto de Ciro), pues ello iría en contra del contexto; no es tampoco el templo principal de Samaría, con cuya ruina quedaría arruinado todo el reino de Israel (Ewald, Símaco), pues los templos erigidos para los becerros de oro en Dan y Betel suelen llamarse Bēth bâmōth (de los ídolos), no Bēth Yehōvâh o de Yahvé. Esa casa de Yahvé no es tampoco la tierra de Yahvé, ni aquí ni en Os 9, 15 (Hitzig), pues una tierra no es una casa. En contra de eso, la casa de Yahvé era Israel, como porción y lote de la congregación del Señor como en Os 9,15; Num 12, 7; Jer 12, 7; Zac 9, 8. Cf. οἶκος Θεοῦ en Heb 3, 6 y 1 Tim 3, 15.

8, 2. La ocasión para el juicio era la transgresión del pacto y de la ley del Señor, que se describe de un modo más detallado en 1 Tim 3, 4. En su angustia ellos clamarán y pedirán la ayuda de Yahvé, diciendo cada uno, con triste lamento, que le conocen. Israel está en aposición al sujeto implicado en el verbo. Ellos dicen que conocen a Yahvé en la medida en que él se ha revelado a toda la nación, y de esa forma, el hecho de que invoquen el nombre de Yahvé, es una prueba de que pertenecen al pueblo de Dios.

8, 3. Pero este conocimiento de Dios, mirado simplemente como una relación histórica con él, no puede traer salvación. Israel ha desechado a Dios, por eso Dios les desechará, como el mismo Dios responde a quienes le gritan.

טוב no significa aquí Yahvé como el Dios más alto (Jerónimo) o como “el Dios bueno” (Sims.), ni la buena Ley de Dios (Schmieder), sino el bien o la salvación que Dios ha garantizado a la nación a través de su pacto de gracia, la gracia que él concede a los que guardan su alianza. Pero, dado que Israel ha despreciado ese bien, el enemigo le perseguirá.

Comentario al texto hebreo del Antiguo Testamento - Profetas Menores

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