Читать книгу Salud y asistencia sanitaria en España en tiempos de pandemia covid-19 - Juan Carlos Alvarez Cortes - Страница 46
1. ANTES DE LA PANDEMIA. PLANTEAMIENTO ESTRATÉGICO: EL ENVEJECIMIENTO DE LA POBLACIÓN, LA CONSTRUCCIÓN DE SISTEMAS DE SALUD EFICIENTES Y SOSTENIBLES Y LUCHA CONTRA LAS DESIGUALDADES SANITARIAS
ОглавлениеEn junio de 2006, el Consejo de la Unión Europea adoptó una Declaración sobre los valores y principios comunes de los sistemas sanitarios de la UE, que incluye como valores esenciales “la universalidad, el acceso a una atención sanitaria de calidad, la equidad y la solidaridad” [Conclusiones del Consejo sobre los valores y principios comunes de los sistemas sanitarios de la Unión Europea (2006/C 146/01)]. Poco después, en 2007, la Comisión presentó la estrategia comunitaria en materia de salud, en el Libro Blanco Juntos por la salud: un planteamiento estratégico para la UE (2008–2013)7. Se proponía con ella reforzar la importancia estratégica de la salud, con el objetivo general de promoción del bienestar de los ciudadanos y con el estímulo a la cooperación entre Estados miembros en materia de salud y servicios sanitarios.
Esta Estrategia de largo alcance debe basarse en los “principios fundamentales de la acción comunitaria en materia de salud”. Entre ellos: 1.°. Una estrategia basada en valores sanitarios compartidos, considerando como valores esenciales la universalidad, el acceso a una atención sanitaria de calidad, la equidad y la solidaridad (conforme a la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea); que potencie como valor fundamental el papel de los propios ciudadanos (atención sanitaria centrada en el paciente y prestada de forma cada vez más individualizada, convirtiendo al paciente en sujeto activo de la atención sanitaria y no en un mero objeto de la misma); y que incluya la reducción de desigualdades sanitarias. 2.°. La centralidad de la salud para el bienestar de los particulares y de la sociedad, considerando que una población sana es un requisito indispensable para la productividad y para la prosperidad económica y que no debe percibirse el gasto sanitario únicamente en términos de coste, sino también como una inversión de futuro. 3.°. También, la integración de la salud en todas las políticas (Iniciativa HIAP), considerando que la salud de la población no es sólo un asunto de política sanitaria sino que también son determinantes otras políticas comunitarias (la política regional y de medio ambiente, la reglamentación de los productos farmacéuticos y los productos alimenticios, la investigación y la innovación en el ámbito de la salud, la coordinación de los regímenes de seguridad social, la sanidad en la política de desarrollo, la salud y la seguridad en el trabajo, las TIC, entre otras). 4.°. Reforzar la voz de la Unión Eruropea en el ámbito de la salud a nivel mundial, teniendo en cuenta la realidad de un mundo globalizado.
No obstante, en la últimas décadas ya se han ido poniendo de manifiesto una serie de retos para la salud de la población, cada vez más acuciantes, que exigen un nuevo planteamiento estratégico por la salud en Europa y en los distintos Estados nacionales.
– En primer lugar, la evolución demográfica está cambiando los patrones patológicos e introduce nuevas cargas –o cambian cuantitativa o cualitativamente las ya existentes– que pesan sobre la sostenibilidad de los sistemas sanitarios de la Unión Europea. En esta evolución destacan el envejecimiento de la población y el número cada vez mayor de pacientes con enfermedades crónicas o de larga duración que están incrementando las hospitalizaciones, asistencia continua y mayores costes sanitarios. Ello exige profundizar en las herramientas de coordinación y de cohesión territorial de la atención sanitaria en los distintos niveles europeo, nacional y autonómico (asistencia sanitaria multinivel), de forma que se afiancen los aspectos positivos y se mitiguen las deficiencias detectadas.
– En segundo lugar, se han planteado nuevos riesgos para la salud que derivan de la globalización, de los conflictos del mundo actual y del cambio climático. Las pandemias (ya anticipadas antes de la grave crisis sanitaria derivada de la COVID-19), los incidentes físicos y biológicos graves y el bioterrorismo se van a suceder previsiblemente en las próximas décadas y constituyen acuciantes amenazas potenciales para la salud. El cambio climático está también en el origen de nuevos patrones de enfermedades contagiosas.
– En tercer lugar, los sistemas de atención sanitaria han evolucionado mucho en los últimos años, en parte como consecuencia del rápido desarrollo de nuevas tecnologías, que están revolucionando la forma en que fomentamos la salud y predecimos, prevenimos y tratamos las enfermedades. Se trata de tecnologías de la información y la comunicación (TIC), innovaciones en genómica, biotecnología y nanotecnología.
El Reglamento (UE) Núm. 282/2014 de 11 de marzo de 2014 relativo a la creación de un tercer programa de acción de la Unión en el ámbito de la salud para el período 2014-20208 reitera el objetivo fundamental, conforme al art. 168 TFUE, de garantizar un alto nivel de protección de la salud humana en la definición y ejecución de todas las políticas y acciones de la Unión. Se establece que la Unión debe complementar y apoyar las políticas nacionales en materia de salud, fomentar la cooperación entre los Estados miembros y facilitar la coordinación entre sus programas, respetando íntegramente las responsabilidades de los Estados miembros por lo que respecta a la definición de sus políticas de salud, así como a la organización y prestación de servicios sanitarios y atención médica.
El Programa fijado a través de este Reglamento comunitario establece que los objetivos generales del mismo serán: complementar y apoyar las políticas de los Estados miembros para mejorar la salud de los ciudadanos de la Unión y reducir las desigualdades sanitarias promoviendo la salud, fomentando la innovación en la sanidad, aumentando la sostenibilidad de los sistemas sanitarios y protegiendo a los ciudadanos de la Unión de las amenazas transfronterizas graves para la salud. La innovación en materia de salud se debe entenderse como una estrategia en materia de salud pública que se base en los siguientes aspectos: no debe limitarse a los avances tecnológicos en términos de productos y servicios; se deben centrar también en estrategias de prevención, la gestión del sistema sanitario; la organización y la prestación de servicios sanitarios y asistencia médica; y la mejora de la rentabilidad y la sostenibilidad de los servicios sanitarios y la atención médica.
La Comisión ejecutará el Programa mediante la adopción de programas anuales de trabajo9, adoptados mediante actos de ejecución, que establecerán, en particular, las acciones que deban emprenderse, incluida la asignación indicativa de recursos financieros. Para ello se establecen cuatro grandes prioridades temáticas:
1. Promover la salud, prevenir las enfermedades y fomentar entornos que propicien estilos de vida saludables, teniendo en cuenta el principio de “salud en todas las políticas”.
2. Proteger a los ciudadanos de la Unión de las amenazas transfronterizas graves para la salud.
3. Contribuir a unos sistemas sanitarios innovadores, eficientes y sostenibles.
4. Facilitar el acceso de los ciudadanos de la Unión a una asistencia sanitaria mejor y más segura.
La promoción de la salud a nivel de la Unión Europea es también parte integrante de “Europa 2020: Una estrategia para un crecimiento inteligente, sostenible e integrador” (“Estrategia Europa 2020”), adoptada mediante Comunicación de la Comisión de 3 de marzo de 2010 [COM(2010) 2020 final]. Dentro de la prioridad “Crecimiento integrador: una economía con un alto nivel de empleo que promueva la cohesión económica, social y territorial”10, se incluyen una serie de medidas, entre las que destaca la modernización y consolidación de los sistemas de protección social y se considera necesario llevar a cabo un esfuerzo importante para combatir la pobreza y la exclusión social, reducir las desigualdades en materia desalud y asegurarse de que todos puedan beneficiarse del crecimiento. Igualmente importante será la capacidad para alcanzar el objetivo de promover una vida sana y activa de una población envejecida que permita la cohesión social y una productividad mayor.
En este ámbito, dentro de la “Estrategia Europa 2020” se incluye la iniciativa emblemática “Plataforma europea contra la pobreza”, dentro de la cual, a escala de la UE, la Comisión asume la tarea de “Evaluar la adecuación y viabilidad de los sistemas de protección social y de pensiones y estudiar los medios de garantizar un mejor acceso a los sistemas sanitarios” y, en su respectivo nivel, los Estados miembros necesitarán “desplegar completamente sus sistemas de seguridad social y de pensiones para asegurar un apoyo adecuado a las rentas y el acceso a la atención sanitaria”.