Читать книгу Evaluación de procesos: una mirada crítica y propositiva de la situación de la política e instrumentos de Ordenación del Territorio en España - Joaquín Farinós Dasí - Страница 25

Las políticas de OT de las CCAA, además de definir las líneas maestras a nivel regional, se dotan de instrumentos de ordenación de carácter subregional, lo que permite adaptar la OT a las peculiaridades de los territorios. El recorrido a este nivel presenta fuertes desigualdades entre CCAA: mientras algunas se han dotado de estos instrumentos y han cubierto todo o gran parte del territorio autonómico, otras ni siquiera han conseguido aprobar estos instrumentos; un tercer grupo ha avanzado pero cubriendo únicamente una parte de la región.

Por otra parte, siendo básica esta territorialización de las políticas autonómicas, en las políticas de desarrollo económico este proceso resulta menos frecuente y cuando aparece lo hace con mucha más timidez12. Así, cuando efectivamente se avanza hacia una articulación de los diversos departamentos de carácter económico en torno a una lógica y estrategia conjunta de desarrollo económico regional, esta dinámica raras veces se dota de una dimensión territorial subregional. Al contrario, muy frecuentemente se echa en falta la definición de una dimensión territorial de la política autonómica de desarrollo económico, de modo que la falta de conexión entre la OT y la política económica identificada a nivel autonómico se replica a escala territorial (subregional). De este modo, los planes e instrumentos subregionales de la política de OT difícilmente van a poder dotarse de la perspectiva integral y de la conexión con la política económica a esta escala territorial (subregional). Y todo esto a pesar del impulso que durante las últimas décadas la UE está dando a la conformación de políticas de carácter integral y participativo en los distintos territorios (esto es, a escala subregional), algo que partiendo de las iniciativas Leader en los territorios rurales se ha extendido y generalizado a otros territorios a partir de proyectos como los Pactos Territoriales por el Empleo, las Estrategias de Desarrollo Local Participativo (CLLD) o las Estrategias de Desarrollo Urbano Sostenible (EDUSI), por poner algunos ejemplos13. Algo que también se acompaña de un esfuerzo similar a escala regional con las Estrategias de Especialización Inteligente, inicialmente centradas en Investigación e Innovación pero que han evolucionado hacia una perspectiva territorial de carácter más integral, fundamentada en los principales recursos estratégicos de cada espacio.