Читать книгу La ciudad de Dios. Libros XVI-XXII - San Agustín - Страница 33
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ОглавлениеAsimismo, Dios se apareció a Abraham junto a la encina de Mambre en forma de tres varones que, sin lugar a dudas, eran ángeles165; aunque algunos consideren que uno de ellos era Cristo, el Señor166, afirmando que él había sido visible también antes de revestirse de carne. Ciertamente, es propio del poder divino e invisible, de la naturaleza incorpórea e inmutable, aparecer incluso ante la mirada de los mortales sin ningún cambio en su ser, no por lo que es, sino por algo que está sometido a él. Pero ¿qué no está sometido a él? Sin embargo, si afirman que uno de esos tres era Cristo porque, habiendo visto tres, se dirigió al Señor en singular (pues así está escrito: Y he aquí que tres varones estaban en pie ante él, y al verlos corrió a su encuentro desde la puerta de su tienda, y se prosternó sobre la tierra y dijo: Señor: si he encontrado la gracia ante ti167, y lo demás) ¿por qué no advierten que dos de ellos vinieron para destruir a los habitantes de Sodoma, mientras que Abraham se dirigía entonces a uno solo llamándole Señor e intercediendo para que en Sodoma no perdiera al mismo tiempo al justo con el impío? Por su parte, Lot recibió a aquellos dos de tal manera que incluso él mismo en su conversación con ellos se dirige al Señor en singular. En efecto, después de haberles dicho a ellos en plural: Señores, desviaos a la casa de vuestro siervo168, y lo demás que se dice allí, sin embargo, a continuación se lee así: y los ángeles asieron su mano, y la mano de su esposa y la mano de sus dos hijas porque el Señor le perdonaba. Y se hizo, tan pronto como lo llevaron fuera, y dijeron: pon a salvo tu vida, no mires atrás y no te detengas en toda la región, ponte a salvo en el monte para que no seas alcanzado. Por su parte, Lot les dijo a aquellos: te ruego, Señor, porque tu siervo halló la misericordia ante ti169, y lo que sigue. A continuación, tras estas palabras también el Señor le responde en singular, aunque estaba en forma de dos ángeles, diciendo: He aquí que he admirado tu rostro, y lo demás. Por ello, es mucho más creíble que Abraham en los tres hombres y Lot en los dos reconocían al Señor, al que se dirigían en número singular, aunque juzgasen que estos eran hombres. Y no por otro motivo los recibieron de tal manera que les sirvieron como a mortales y necesitados de alimento humano. Pero, indudablemente, había algo por lo que destacaban, aun en su humanidad, hasta el punto que aquellos que les mostraban hospitalidad no pudieran poner en duda que el Señor estaba en ellos, como suele estarlo en los profetas. Y, por ello, también unas veces se dirigían a ellos mismos en plural y otras al Señor en ellos en singular. Por otra parte, la escritura atestigua que fueron ángeles, no solo en este libro del Génesis, donde se relatan estos hechos, sino también en la Epístola a los hebreos, donde, alabando la hospitalidad dice: Gracias a esta incluso algunos sin saberlo recibieron en hospitalidad a ángeles170. Por consiguiente, por medio de aquellos tres hombres, cuando de nuevo se le prometió a Abraham un hijo de Sarra, Isaac, también le fue dada una respuesta divina que se expresaba así: Abraham se convertirá en un pueblo grande y numeroso, y serán bendecidos en él todos los pueblos de la tierra171. Y aquí se han realizado aquellas dos promesas de manera muy concisa y completa: el pueblo de Israel según la carne y todos los pueblos según la fe.