Читать книгу Justicia digital, mercado y resolución de litigios de consumo - Fernando Esteban de la Rosa - Страница 36
I. INTRODUCCIÓN
ОглавлениеEl uso de la tecnología en la administración de la justicia y en la resolución de conflictos en Inglaterra está siendo incorporado de manera progresiva, aunque se aprecia una aceleración en los últimos años. En el ámbito jurisdiccional las experiencias comenzaron en el año 2000 con el proceso monitorio (Money Claim Online) a las que ha seguido el Tribunal de Multas de Tráfico (Traffic Penalty Tribunal). Sin embargo, ha sido en 2017 cuando Reino Unido ha hecho la mayor inversión con la puesta en línea del sistema judicial. Ese año el gobierno acordó hacer una inversión de £1.200,000.000 durante cinco años con el fin de modernizar y digitalizar la justicia. Una parte significativa de este presupuesto proviene del dinero obtenido de la venta de juzgados hasta entonces infrautilizados2. De este modo se inició un proceso de venta de edificios judiciales en distritos con poco volumen de casos. El capital obtenido ha sido empleado para contribuir a financiar la digitalización de una justicia más centralizada y accesible.
En el ámbito de la resolución alternativa de litigios de consumo (conocido con el acrónimo inglés de ADR por Alternative Dispute Resolution), cabe destacar que en el año 2016 entró en vigor la normativa europea de resolución alternativa y en línea de litigios de consumo3. Esta normativa, que por cierto ha sido parcialmente derogada a raíz del Brexit, ha impulsado la competencia entre las entidades ADR de consumo. Muchas de ellas, que ya utilizaban las comunicaciones electrónicas –principalmente los correos electrónicos y las llamadas telefónicas– han empezado a usar plataformas en línea (conocidas como ODR por Online Dispute Resolution). Así ha sucedido en el caso del Center for Effective Dispute Resolution (CEDR), una de las mayores entidades ADR en el Reino Unido4, la cual utiliza la plataforma ODR de Modria5 para varios de sus procesos de consumo, entre ellos los que gestionan las reclamaciones contra aerolíneas o contra empresas de telecomunicaciones. En el sector privado la inversión en tecnología ODR ha tenido el doble objetivo de atraer la adhesión de más empresas y facilitar la gestión de un mayor volumen de casos.
El presente capítulo explora el creciente uso de la tecnología como vehículo para la resolución de controversias de consumo, tanto en el ámbito jurisdiccional como en el ámbito de la resolución alternativa de conflictos en línea (ODR). En primer lugar, después de una breve referencia a la asistencia legal y al uso de incentivos para llegar a acuerdos en el proceso civil, examinamos el nuevo Juzgado Online que actualmente opera de manera piloto e incorpora negociación online y mediación telefónica en su procedimiento. A continuación, estudiamos la digitalización de dos tribunales describiendo los dos tribunales más avanzados en este respecto: el Tribunal de Multas de Tráfico y el proyecto piloto del Tribunal de la Seguridad Social. Con respecto a los ADR, este capítulo analiza los dos procesos principales, la adjudicación y el modelo ombudsman. También abordamos la importancia del diseño del proceso ADR y ODR. Por último, el presente capítulo examina el rol de la tecnología como herramienta para canalizar el conflicto.