Читать книгу Manual de Derecho Administrativo - Luis Martín Rebollo - Страница 87

Para mejor comprender el texto de los vigentes Tratados no resulta impertinente describir de forma somera su estructura y hacer referencia a sus contenidos y novedades más destacadas.

Como ya adelanté, el Tratado de Lisboa es un Tratado que se limita a reformar los anteriormente existentes y, por sí mismo, no tiene otra eficacia sustantiva. Al modificar los Tratados existentes se tomó como referencia el modelo del fracasado Tratado por el que se establecía una Constitución para Europa despojado de sus aspectos más polémicos. Y así, ahora se contemplan con más precisión las competencias de Unión, se insiste en el principio de subsidiariedad, se da valor jurídico formal a la Carta de los Derechos Fundamentales proclamada en Niza, se atiende al papel de los Parlamentos nacionales en la arquitectura europea y, lo que más interesa ahora, se intenta simplificar los textos para facilitar su comprensión. En adelante, habrá dos Tratados: el Tratado de la Unión Europea (TUE) y el Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE). Ambos traen causa de los anteriores TUE y TCE y en los dos se llevan a cabo profundos cambios de estructura, de redacción, de orden y de contenidos. Para hacer referencia a los cambios más importantes lo mejor es abordar por separado cada uno de ellos a partir de sus versiones consolidadas.